Guardians of the Galaxy: Todo es mejor con Bacon, Kevin Bacon
El forajido Peter Quill alias Star-Lord (Chris Pratt) decide robarle un misterioso orbe a Ronan El Acusador (Lee Pace), por lo que Quill es perseguido por varios mercenarios y asesinos, entre ellos están un mapache modificado genéticamente llamado Rocket (Bradley Cooper), un árbol humanoide denominado Groot (Vin Diesel), Gamora (Zoe Saldana), una sexi alienígena y Drax El Destructor (Dave Bautista), un vengativo e iracundo extraterrestre, pero todos ellos, incluido Star-Lord son apresados por las autoridades galácticas así que este heterogéneo grupo debe unir fuerzas para escapar de la ley y de la furia de Ronan, quien está decidido a propagar el terror y el caos a lo largo de la galaxia.
Después de años de adaptaciones de comics y libros centrados en temas de fantasía, Disney y Marvel Studios nos traen una trama que nos cuenta como en cierta parte del universo, un grupo de criminales inconformes con sus pasados, buscan saldar cuentas a través de venganzas y ambiciones principalmente, pero que para su desgracia o fortuna, el destino los une para salvar al universo.
El cosmos interestelar que sirve como marco para esta odisea, evoca aquél creado por George Lucas en 1977, dada la cantidad y el tipo de villanos que muestra, las razas extraterrestres, la interacción entre los protagonistas, etc., en pocas palabras el tono relajado y un tanto irreverente de la cinta recuerda mucho a La Guerra de las Galaxias.
Pero las referencias y elementos que podemos encontrar en la cinta no terminan con Star Wars, sino que tanto el director James Gunn como por la guionista Nicole Perlman recurren a otras cintas para poblar su universo, entre las que encontramos están Los Cazadores del Arca Perdida, Doce del Patíbulo, El Halcón Maltés, Cobra, El Vengador Anónimo, incluso una cinta como Footlose tiene cabida en este universo, asimismo hace referencia a diversas cintas de Marvel Studio como por ejemplo The Avenger: Los Vengadores. Por otra parte, Gunn y Perlman incorporan múltiples menciones de pintores, actores y demás artistas de la cultura pop. Lo que convierte a esta cinta en un coctel pop de proporciones astronómicas.
Una de las características más apreciadas con las que cuenta Guardianes de la Galaxia es el humor, un humor que corre a cargo principalmente del carismático Chris Pratt, pero también es apoyado por Bradley Cooper, quien personifica a un mapache socarrón y bocón y por Vin Diesel cuyo personaje sólo sabe decir “I am Groot” (Yo soy Groot) y aun así logra transmitir toda una gama de pensamientos e ideas. En cuanto a los demás protagonistas, tanto Zoe Saldana como Dave Bautista también aportan un poco de risas con sus comentarios y actitudes.
Todos ellos, tanto los actores como sus personificaciones, logran una gran química como grupo, pues cada uno aporta algún elemento a su correspondiente personaje que lo hace único. En conjunto resultan en una mezcla perfecta de superhéroes que a simple vista parecieran ser un montón de perdedores pero que al final se convierten es guardianes del orden galáctico.
Algo que también vale mucho en la película es el soundtrack, pues podemos escuchar canciones como “Hooked on a Feeling” de Blue Swede, o “Come and Get Your Love” de Redbone, e incluso “I Want You Back” de Jackson 5. Además de que el score a cargo de Tyler Bates complementa la experiencia musical y magnifica la sensación que transmite cada escena.
Guardianes de la Galaxia logra distinguirse del resto de las entregas de Marvel, no sólo por la historia, sino por sus elementos novedosos al género, una mezcla de emotividad, rareza, referencias pop y humor que ocurre en el espacio donde la música terrestre marca una pauta para que cualquier patán se convierta en héroe de una galaxia muy lejana. Señoras y señores estamos ante lo que parece ser una cinta de culto de los próximos 10 años. Y todo gracias a Kevin Bacon.
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