El problema con re-imaginar los clásicos cuentos de hadas

Existe una creciente tendencia a “adaptar y actualizar” los clásicos cuentos de hadas pero esta tendencia tiende a sacrificar la profundidad de la temática y el contenido a favor del entretenimiento y el beneficio monetario. Por lo tanto, he decidido exponer las deficiencias de los cuento de hadas de adaptadas en este siglo.

1. Trama sin Enfoque

Los cuentos de los Hermanos Grimm y las leyendas nos permiten explorar nuestros miedos colectivos e imaginar sobre los misterios del universo a través de la fantasía. Los héroes y villanos que pueblan estas narraciones sirven como una alegoría a las emociones, los deseos reprimidos y valores personales, así como las virtudes y defectos existentes en las personas. Sin embargo, esto presenta un dilema para los cineastas y sus guionistas: ¿Cómo explotar el rico contenido metafórico que se encuentra en estos simples melodramas de fantasía y además de representar los múltiples hechos que rodean a los personajes?

Bueno, por lo general la respuesta implica aglomerar diferentes influencias e ideas, lo que resulta en películas que tratan de cubrir mucho terreno pero que terminan por no conseguirlo. Consideremos, por ejemplo, La Chica de la Capa Roja (Red Riding Hood), que toma elementos de un romance sobrenatural y lo combina con una narración plagada de misterio y horror. Por desgracia, el resultado es una atenuada exploración de la sexualidad de una joven alrededor de predecible examen de miedo y paranoia.

BlancaNieves y El Cazador (Snow White and The Huntsman) es otro ejemplo de ello, ya que se siente como la historia está tirando en direcciones diferentes. En un momento dado, estamos viendo los juegos de intrigas de la corte en la que vive la protagonista para después introducirnos en el territorio de la fantasía épica sin lograr definirse en alguno de los 2 géneros narrativos dejando el desarrollo de ideas a medias. Pareciera que los productores están más preocupados por construir un “mundo” para posibles secuelas y convertir una simple fábula en una exitosa franquicia. En otras palabras: Un montón de ideas a medias no logran una película completa.

2. Imágenes bonitas pero desordenadas

Espejito, espejito (Mirror Mirror) y BlancaNieves y El Cazador (Snow White and The Huntsman) son dos narraciones del mismo cuento de hadas, con un magnifico nivel de producción, vestuario, escenografía y efectos visuales visualmente atrayentes. El problema es que tal nivel de producción no se refleja en el área técnica, en este caso la fotografía y la edición. Pues muchas de las tomas individuales de estas cintas son preciosas pero al momento de realizar la edición la producción no encontró la forma de darle coherencia a dichas tomas, y es que la verdadera esencia del cine es el crear secuencias atractivas y memorables.

Otro problema relacionado es el exceso de CGI, el cual muchas veces parece ser más importante que la trama que intenta recrear. En general, los efectos especiales de fantasía pueden impresionar al público general, sin embargo muchas veces este espectáculo resulta vacuo y superficial ya que, como se mencionó en el punto anterior, la trama resulta ser endeble y con ideas a medio desarrollar. Básicamente, uno se siente como si solamente viéramos imágenes “interesantes” sin nada que contar.

3. Sin un fuerte núcleo moral

Dirán lo que quieran acerca de las películas animadas de Disney pero al menos presentaba lecciones morales de manera coherente. El problema es que las adaptaciones recientes no logran hacerlo y es que a pesar de que los cuentos de hadas originales muchas veces representan enseñanzas que pudieran considerarse “arcaicas y fuera de la realidad contemporánea” estas pueden adaptarse de forma inteligente a los tiempos que corren, como por ejemplo el “proto-feminismo” que algunas adaptaciones intentan mostrar; pero las heroínas, y en su caso los héroes, carecen de las motivaciones, la fortaleza, la voluntad y en alguno casos del carisma suficiente para intentar transmitir al espectador el mensaje necesario.

Y a diferencia de otras películas de cuentos de hadas aclamadas y originales como por ejemplo El Laberinto del Fauno, estas re-imaginaciones no aportan a los espectadores motivos suficientes para re-visitar las historias y los temas familiares. Por lo cual, tampoco son lo suficientemente memorable para quedarse en la mente de los espectadores más jóvenes que se exponen a estas historias clásicas por primera vez. Básicamente, dichas historias re-imaginadas son desechables, exactamente lo contrario de lo que los buenos cuentos de hadas se supone deban ser.

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