Ted: Viejos Amigos

Seth MacFarlane, creador de series animadas para la televisión, se ha caracterizado por dotar a sus creaciones con un humor irreverente, caustico y hasta cierto punto estrafalario, en pocas palabras no apto para personas demasiado conservadoras. Ahora da su salto al cine con su largometraje Ted.

El pequeño John Bennett deseaba tener un amigo verdadero y el sueño se volvió realidad cuando su oso de peluche, Ted, cobra vida. Pero la vida sigue su curso y John (Mark Walberg) y Ted (Voz de Seth MacFarlane) se convierten en adultos y con ello vinieron algunos cambios pues la personalidad de Ted es la de un adulto holgazán, adicto ala marihuana, Donjuán y Fan de Flash Gordon. Mientras que John es un inmaduro emocional que se niega a crecer pues no desea perder la amistad con su osito de peluche. Su tolerante novia Lori (Mila Kunis) no quiere interferir en este afecto, pero está cansada de esperar que John cambie de actitud. ¿Logrará John renunciar a Ted y convertirse en un hombre de provecho? ¿O perderá a su enamorada junto con toda esperanza de una existencia normal?

Confieso que no soy gran admirador de los programas MacFarlane pues su característico humor vulgar y políticamente incorrecto por momentos me parece demasiado ofensivo para el promedio de la gente pero por otra parte me agrada que no se tiente el alma al criticar dura y ferozmente los estereotipos culturales existentes y los acontecimientos contemporáneos a dichas series. Ahora bien, y hablando de su ópera prima, el humor de Ted consiste en el contraste de ver al oso de peluche disfrutando sus numerosos vicios y comportándose como un patán vulgar e irresponsable. Dicho chiste resultaría insostenible para cualquier otro director guionista pues intentaría dar gusto a todo el público para evitar herir sensibilidades pero MacFarlane consigue mantenerse fresco a lo largo de sus 106 minutos pues en ningún momento dejó que la censura lo coartara, lo que demuestra que se puede desenvolver perfectamente con actores de carne y hueso manteniendo el humor gracias a su ácido guion, sus constantes cameos, las referencias a la cultura por de los 80’s y la naturalidad de sus protagonistas.

Otros elementos que hacen de Ted una cinta agradable es la amistad sincera entre hombre y felpudo, y aunque es obvia la existencia de una codependencia nociva, no puede discutirse el genuino afecto que se tienen, y el apoyo que se dan cuando más lo necesitan. Además tenemos las ya señaladas referencias ochenteras, principalmente a películas, incluso la música introduce algunos tonos de bandas sonoras de dichas películas.

Buena producción, buenas actuaciones, Ted sin duda alguna se perfila para ser una de las cintas más divertidas y geniales del año; el único enemigo de esta comedia será el paso del tiempo, dentro de unos 5 ó 10 años algunas bromas presentes serán imperceptibles y se perderá parte de su originalidad.

Si eres de mente abierta y no te espantas con cualquier peladez, corre a verla y reír en demasía pero si cualquier cosita te espanta mejor ignórala porque de seguro la odiaras, los demás no pueden darse el lujo de dejar pasar este extraordinario film, cero pretencioso y solo pretende hacer reír y lograr que pases un excelente rato.

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