Nos merecemos llegar hasta aqui.

Desde las primeras imagenes de Children of Men (Niños del Hombre) se siente una atmosfera apatica, desolada y tan real que da miedo. El mundo se a convertido en un lugar donde no existen los niños, los conflictos han acabado con la poca belleza que existe y todos tratan de correr como ratas que escapan de un edificio en llamas hacia un lugar seguro, solo que ahi nadie los quiere. La Inglaterra del 2027 se a convertido en lo que más odio casi 80 años antes, en fascistas; Todo es controlado, los ciudadanos tienen que pasar por revisiones para ser aceptados o de lo contrario son detenidos, y los inmigrantes son encarcelados y deportados al infierno del que trataron de escapar. Esto ha creado ademas, una atmosfera de anarquia donde los radicales causan terror por igual.

El protagonista Theo Faron (Clive Owen) es una persona sin aspiraciones, gris y sin esperanzas a la cual le importa un comino si muere y el mundo se va al infierno mañana o no, el unico momento de cordura y realidad, por asi decirlo, es cuando visita a su tutor Jasper (Michael Caine).

Despues todo cambia, es metido por la fuerza a una mision que no quiere y ni necesita, la cual en principio realiza solo por su ex-pareja Julian (Julianne Moore) pero cuando ella falta, él decide regresar a ese mundo gris; Aqui es donde es testigo de algo maravilloso, la mision que le pedia era sacar del pais a una mujer embarazada, Kee (Clare-Hope Ashitey) una inmigrante, la primera en 18 años, ya que el gobierno queria matarla por su condicion de inmigrante y un grupo radical "The Fishes" quieren usar al bebe como bandera politica.

De pronto se convierte en un padre y un esposo que no quiere, pero que sin embargo su humanidad y conciencia le dicen que debe serlo. El menos indicado para el trabajo y ahora de él depende el futuro de lo poco que queda de esta tan desvalorada humanidad.

Parte de la historia hace referencia a una historia tan bonita como lo es la de la "Sagrada Familia Cristiana". Theo un padre no biologico que debe de cuidar de la madre y del bebe que parecen ser la salvación del mundo, Kee una madre joven que desconoce lo que es un bebe, pero sabe que es algo maravilloso sucedera si este nace y Miriam una partera que cuida a Kee como si fuera su hija. Y Julian como el Angel que lo comunica y conoce la condicion de Kee. Todos ellos escapando de las envidias, los malos entendidos, los rencores y las malas intenciones que reinan a su alrededor.

Cuando por fin se da el nacimiento de la criatura, en condiciones pauperrimas, Theo es testigo participe de un milagro, hacia años que no veia el nacimiento de un infante y menos de cargar alguno y de verlo. Trata de mantener a ambas a salvo, e incluso las resguarda con tres adorables ancianas que se alegran de ver tan marvilloso suceso. Pero esto no detiene la guerra que se avecina, no hasta que la niña llora y es ahi cuando todos quieren ser participes de aquel milagro, los soldados se detienen, los disparos cesan, la muchedumbre calla, solo se escuchan oraciones y palabras de aliento. Algo tan común como el llanto de un bebe acalla todo lo sonido y voz de desesperanza.

Es una de las peliculas tan emotiva y con un mensaje  a considerar. Pocas me han causado esa sensación de analisis y por decir poco, tristeza. 

El hombre se merece todo lo que malo que le pase, solo ellos pueden causar tanto dolor y miseria a su alrededor. Nadie merece perdón, ni misericordia

Luzos Decaz

Despues de todo hay algo bueno en las personas y merecen como tú, ser perdonadas. A veces solo hay que mostrarles la luz.

Marian