The Last Airbender: Puro Aire (Aparentemente)
La tan esperada adaptación de la serie animada televisiva: Avatar: La leyenda de Aang nos llega de la mano de M. Night Shyamalan, quien corre a cargo del guión, la dirección y producción de la misma bajo el nombre de The Last Airbender (El Ultimo Maestro del Aire).
Aang (Noah Ringer) es un Avatar cuyo trabajo es traer la paz y el equilibrio entre la Nación del Fuego, el Reino Tierra, las Tribus Agua y los Nómades del Aire, siendo el único que puede controlar los 4 elementos. A él se unen Sokka (Jackson Rathbone) y Katara (Nicola Peltz), quienes viajan por el mundo para que el protagonista aprenda a manipular todos los elementos mientras es perseguido por el príncipe de la nación del Fuego Zuko (Dev Patel).
La película tiene todos lo elementos para volverse épica pues cuenta con una buena producción detrás, vestuario, ambientación, efectos especiales, fotografía y música, haciendo énfasis en este ultimo rublo pues es James Newton Howard quien se encarga de la composición de la misma, quien ya ha demostrado sus dotes artísticas con temas de películas como The Dark Knight, King Kong (2005), entre otras. Todos estos elementos de alguna manera si logran transportarte a los diseños ya vistos en la serie animada, pues se percibe que trataron de mantenerse fieles en es rublo y asi tener contentos a los fieles seguidores.
Pero falla en lo más importante: la dirección y el guión, pues Shyamalan no saca las mejores representaciones de sus actores a cargo pues estas se siente carentes de expresión o en otros casos sobre-actuadas, como lo es el personaje de Sokka (Jackson Rathbone) quien originalmente era un joven ingenioso y el gracioso del grupo, siendo en esta ocasión relegado a ser alguien sin mucha iniciativa y poco gracioso, o Zuko (Dev Patel) quien por momentos se ve sobre-actuado y poco creíble. Quienes esperaba más, sobre todo por ser personajes poderosos en términos de guerra son Aang (Noah Ringer) y el General Iroh (Shaun Toub) pues el primero se contiene muchas veces al momento de transformarse al estado avatar y el segundo solo se le ve realizar movimientos meramente ofensivos.
El guión es otro tema a parte pues toda la acción se desarrolla de forma irregular, por momentos todo ocurre muy rápido y no se logra explicar los acontecimientos que el grupo vive o cuando se dan las escenas de acción estas son mostradas de una forma lenta y aparentemente alargándola más de lo necesario, pero este error pues perdonarse. Lo que no se puede perdonar, del todo, es los cambios que hace a ciertos personajes, los cuales no diré para evitar la mala vibra, pues pareciera que Shyamalan desconoce gran parte de la trascendencia e importancia de ellos.
La critica ha tratado muy mal a esta película, lo cual se me hace totalmente injusto, ya que tiene elementos buenos, pero debe de mejorar los importantes, como la dirección y el guión. Para realizar esta tarea tiene un par de oportunidades. Si eres überfan de la serie animada tal vez te guste, pero sino deberías ir sin muchas expectaciones y solo para saber de que hablan los demás.
Aang (Noah Ringer) es un Avatar cuyo trabajo es traer la paz y el equilibrio entre la Nación del Fuego, el Reino Tierra, las Tribus Agua y los Nómades del Aire, siendo el único que puede controlar los 4 elementos. A él se unen Sokka (Jackson Rathbone) y Katara (Nicola Peltz), quienes viajan por el mundo para que el protagonista aprenda a manipular todos los elementos mientras es perseguido por el príncipe de la nación del Fuego Zuko (Dev Patel).
La película tiene todos lo elementos para volverse épica pues cuenta con una buena producción detrás, vestuario, ambientación, efectos especiales, fotografía y música, haciendo énfasis en este ultimo rublo pues es James Newton Howard quien se encarga de la composición de la misma, quien ya ha demostrado sus dotes artísticas con temas de películas como The Dark Knight, King Kong (2005), entre otras. Todos estos elementos de alguna manera si logran transportarte a los diseños ya vistos en la serie animada, pues se percibe que trataron de mantenerse fieles en es rublo y asi tener contentos a los fieles seguidores.
Pero falla en lo más importante: la dirección y el guión, pues Shyamalan no saca las mejores representaciones de sus actores a cargo pues estas se siente carentes de expresión o en otros casos sobre-actuadas, como lo es el personaje de Sokka (Jackson Rathbone) quien originalmente era un joven ingenioso y el gracioso del grupo, siendo en esta ocasión relegado a ser alguien sin mucha iniciativa y poco gracioso, o Zuko (Dev Patel) quien por momentos se ve sobre-actuado y poco creíble. Quienes esperaba más, sobre todo por ser personajes poderosos en términos de guerra son Aang (Noah Ringer) y el General Iroh (Shaun Toub) pues el primero se contiene muchas veces al momento de transformarse al estado avatar y el segundo solo se le ve realizar movimientos meramente ofensivos.
El guión es otro tema a parte pues toda la acción se desarrolla de forma irregular, por momentos todo ocurre muy rápido y no se logra explicar los acontecimientos que el grupo vive o cuando se dan las escenas de acción estas son mostradas de una forma lenta y aparentemente alargándola más de lo necesario, pero este error pues perdonarse. Lo que no se puede perdonar, del todo, es los cambios que hace a ciertos personajes, los cuales no diré para evitar la mala vibra, pues pareciera que Shyamalan desconoce gran parte de la trascendencia e importancia de ellos.
La critica ha tratado muy mal a esta película, lo cual se me hace totalmente injusto, ya que tiene elementos buenos, pero debe de mejorar los importantes, como la dirección y el guión. Para realizar esta tarea tiene un par de oportunidades. Si eres überfan de la serie animada tal vez te guste, pero sino deberías ir sin muchas expectaciones y solo para saber de que hablan los demás.
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