Salvación
Fui empujado hasta el borde que se desmoronaba ante mí. Y a medida que me tambaleaba en ese precipicio, mirando hacia la oscuridad del abismo, una mano se acercó, tiró de mí y me dio esperanza.
De: Luzos Decaz, Para: Marian
Fui empujado hasta el borde que se desmoronaba ante mí. Y a medida que me tambaleaba en ese precipicio, mirando hacia la oscuridad del abismo, una mano se acercó, tiró de mí y me dio esperanza.
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