Nada

Es un momento de descanso, en el vacío no hay nada pero a la vez está todo, una fuerte paradoja donde se marca un claro objetivo, el descanso. El silencio absoluto no existe, la ausencia de luz en una oscuridad constante tampoco, dada la gran simbiosis de todos los opuestos que mantienen el equilibrio de nuestra realidad esto representa un respiro hacia el interior. Un momento de transición para un constructivo aprendizaje, al igual que en las técnicas de relajación la búsqueda del silencio trae las palabras más fuertes, detrás de toda confusión no hay mejor manera que la de organizarse para ir resolviendo paso a paso cada interrogante en nuestro ser.

Es un llamado de atención, un momento hacia la reflexión, ya que la nada no existe por si sola encontrándola a ella podremos encontrar los principales conceptos que logran hacernos sentir desorientados, buscando la nada encontraremos el todo. Un claro momento de búsqueda de tranquilidad, en la nada no existe el dinero, en la nada no existe el dolor, en la nada no existen las superficiales satisfacciones ni tampoco se encuentra el escape, porque en la nada no hay nada para escaparse.

Es la tranquilidad, es el silencio hacia las voces que confunden, en la nada no hay camino para perderse sólo camino para encontrarse, en esta nada no hay nadie más que uno, nadie en que pensar, no hay voces ni colores, solo se encuentra el ser.

Este es el momento de buscar la calma, marca un claro final y por consiguiente un claro comienzo, es el momento que aparece la lamparita, ya que en la nada no hay luz y para lograr moverse en este ámbito será necesario encontrar una luz propia, una búsqueda interna que lograra superar este nivel ambiguo y de auto crecimiento.

Dicho concepto se encuentra en el antes y en el después, en este estado el tiempo no existe, no hay medida ya que no hay instrumento que la mida, es aquí donde se describe lo indescriptible. Ahora es tiempo de resolver esos pensamientos más profundos, evacuar esas dudas que han escapado de aquellos sentimientos dolorosos, es momento de dejar en la nada para siempre aquellas cosas que nos atan a seguir creciendo, en la nada no hay ojos para distraerse, sólo se encuentra la más pura esencia que logra dar vida a todo lo que prosigue, detrás del todo está la nada.